¡Bolivia puede vivir del turismo!
Este artículo es una provocación a la racionalidad y al sentido común de la ciudadanía. Cuando no existe combustible para trasladarnos y hay una lista inmensamente creativa de anuncios de paros y bloqueos, movilizaciones y agitaciones político electorales. Cuando las necesidades materiales de la gente aumentan en la misma proporción que se devalúan sus ingresos. Cuando la expectativa de los jóvenes está en encontrar recursos para salir a buscar oportunidades fuera de Bolivia, si, en este momento, y sobre la base de toda la realidad material existente, repito la consigna que en algún momento producirá el efecto de la gota sobre la piedra.
Insistimos los convencidos, que no debemos aflojar en nuestro intento mientras siga repitiendo el poeta costarricense Isaac Felipe Azofeifa, “De veras, hijo/ya todas las estrellas han partido, /pero nunca se pone más oscuro/que cuando va a amanecer”.
Comparto cuatro, de cientos de circunstancia, que no nos permiten guardar silencio.
1. El Bicentenario de la independencia, fecha irrepetible que sostienen desde el gabinete de la Gobernación de Chuquisaca para invitar al mundo a asombrarse con el atardecer en los tejados y ver caminar a caballo por las calles de Sucre a Doña Juana Azurduy de Padilla y a José Vicente Camargo por los viñedos de San Pedro, en los Cintis.
2. El esfuerzo que realizan los tarijeños para que se conozcan las rutas del vino, el perfume del singani en Finca Florencia, se visite el Cañón del Pilaya con sus 3.030 metros de profundidad, comer una chanfaina en la Yunta y tomar un café de especialidad en Antigua, en San Lorenzo.
3. Está pronto a salir de la imprenta el viaje fotográfico y humano de Andrés Maclean, que durante 12 meses recorrió Bolivia marcando una ruta que debemos conocer. The Bolivian Traveler, sello con el que se lo conoce en el mundo, nos deslumbra, y nos asombra con sus colores.
4. Finalmente, el viernes 28 de marzo, en Santa Cruz, por convite del CEPAD, la Federación de Asociaciones Municipales, FAM, la Fundación Solydes, FELCODE y la empresa Sofía, nos reuniremos todos los que estamos convencidos, para mostrar a los incrédulos la Ruta Crítica que Bolivia tendría que seguir para convertir el turismo en política pública. El II Encuentro Nacional sobre Ciudades Intermedias, “Hacia una Bolivia turística” forma parte de una serie de 12 encuentros internacionales, 1 encuentro nacional y varios conservatorios organizados en diferentes municipios del país, que han motivado la búsqueda de respuestas a la relación del territorio, la población y el desarrollo sostenible. La secuencia, que compartiremos, ha deja en evidencia las variables productivas, económicas, institucionales, turísticas, culturales, género y juventud, que acompañan el fenómeno de la vida de la gente en el territorio y la pulsión humana por la migración, conducta y presión histórica que busca mejores territorios para la vida, en condiciones de dignidad y justicia.
¡Como para no estar convencidos!
